Ir al contenido principal

Entradas

La parábola del hijo pródigo en nuestra vida diaria

  La historia del hijo pródigo, que Jesús contó hace mucho tiempo, sigue siendo una enseñanza poderosa para nuestra vida hoy. Jesús dijo: “Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: ‘Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde’; y les repartió los bienes.” (Lucas 15:11-12 RVR1960) El hijo menor quería ser independiente. No confiaba en la guía de su padre y creyó que podía manejar su vida solo. Nos pasa también hoy: queremos tomar nuestras propias decisiones sobre la carrera, las amistades o incluso sobre cómo usar nuestro tiempo, sin detenernos a escuchar la voz de Dios. Poco tiempo después, el joven reunió todo lo que tenía y se fue a un lugar lejano. Allí desperdició sus bienes viviendo sin control. (Lucas 15:13 RVR1960) Esto nos invita a reflexionar: ¿Cómo estamos usando lo que Dios nos ha dado? A veces gastamos nuestra energía en discusiones que no llevan a nada, horas interminables en redes sociales comparándonos con otros, o nuestros talento...

¿Qué pasa cuando me siento lejos de Dios? : Leemos Romanos 8

A veces caminamos por la vida con una carga en el corazón: culpas del pasado, luchas presentes o temores que nos paralizan. Nos preguntamos si realmente Dios está con nosotras en medio de tanto ruido, tantas batallas y tantas caídas. Y es entonces cuando Romanos 8 se convierte en un refugio para el alma. “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.” (Romanos 8:1, RVR1960) Este capítulo comienza con una verdad transformadora: en Cristo ya no hay condenación. Si hemos creído en Él, somos libres. Qué alivio saber que no vivimos bajo la culpa, sino bajo la gracia. Romanos 8 nos muestra que el Espíritu de Dios habita en nosotras. Él nos da vida, nos guía, nos fortalece y hasta intercede por nosotras cuando no sabemos qué orar. No estamos desamparadas en este camino. “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.” (Romanos 8:16, RVR1960) Y si somos hijas, también ...

Libretas Cristianas Imprimibles

A lo largo del día hay palabras, ideas y reflexiones que merecen un lugar especial. Tener una libreta a mano puede ser mucho más que un recurso práctico: puede convertirse en un espacio íntimo donde escribir lo que Dios va mostrando, anotar versículos que tocan el corazón o simplemente organizar lo cotidiano con propósito. Hoy queremos compartir una propuesta sencilla y significativa: un set imprimible para armar libretas cristianas con diseño delicado y femenino. Pensadas para acompañar momentos de reflexión, oración y organización, estas libretas vienen con frases inspiradoras ya diseñadas y listas para usar. Están preparadas para imprimir en tamaño A4 y luego recortar, formando libretas pequeñas de aproximadamente 10 x 15 cm (4 x 6 pulgadas). Un formato cómodo para llevar en el bolso, tener en el escritorio o incluir en un regalo especial. ... ¿Necesitas ayuda? Escríbenos por WhatsApp Cada descarga contribuye a que podamos continuar compartiendo ma...

7 hábitos cristianos para comenzar el día glorificando a Dios

Cada mañana nos ofrece una nueva oportunidad para dedicarle el primer tiempo del día a Dios, reconociendo que es Él quien renueva nuestra mente, fortalece nuestro espíritu y nos guía en cada paso. Comenzar el día con Él nos prepara para vivir con paz, esperanza y obediencia. Hoy queremos compartirte 7 hábitos que podemos incorporar para hacer de este momento un espacio real y transformador de conexión con Dios. Dedicar tiempo a la oración al iniciar el día Antes de comenzar cualquier actividad, apartemos unos minutos para abrir nuestro corazón a Dios, pedir su guía y agradecer por su fidelidad. Así, ponemos en sus manos cada aspecto de nuestra jornada. “No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.” (Filipenses 4:6) Leer un versículo o pasaje bíblico que fortalezca tu fe Escoge un fragmento breve de la Biblia que te recuerde la verdad de Dios y su amor. No es necesario leer mucho, sino con intención...

Cómo estudiar la Biblia sin perderse en el intento

  Estudiar la Palabra de Dios en profundidad puede parecer abrumador. Hay tantos libros, contextos históricos, símbolos y enseñanzas, que a veces no sabemos por dónde empezar ni cómo seguir sin perdernos. Pero lo cierto es que profundizar en las Escrituras no es solo posible, sino también una experiencia transformadora, si lo hacemos con la guía del Espíritu Santo… y algunos pasos prácticos. Hoy compartimos algunas claves que nos han ayudado a sumergirnos en la Palabra con más claridad y disfrute. 1. Oremos antes de abrir la Biblia Nada reemplaza la guía del Espíritu. Antes de comenzar a leer, tomémonos un momento para orar y pedirle a Dios que abra nuestro entendimiento y nos muestre lo que Él quiere enseñarnos. No es un paso formal, es un acto de dependencia. 2. Leamos con una intención clara ¿Estamos buscando conocer más a Jesús? ¿Queremos entender mejor un tema? ¿Estudiar un libro específico? Tener un propósito definido nos ayuda a no divagar y a mantenernos enfocadas. Pod...

Si esta nota fue de bendición, compártela con tus amigas: